El Cementerio General de Cartago, se estableció al entrar en vigencia la Real Orden del 6 de noviembre de 1813, que ordenaba la ubicación definitiva de los cementerios en las afueras de la ciudad.
A raíz de los enfrentamientos entre el Estado y la Iglesia por la administración de este cementerio, el día 19 de julio de 1884 se dictó la Ley de Secularización de Cementerios, de gran trascendencia para el país.
Este cementerio cuenta gran número de esculturas en piedra y mármol, así como mausoleos de gran belleza artística. Además, fue declarado de interés histórico en 1991.
En este cementerio descansan personajes importantes de nuestra historia como Jesús Jiménez, Max Peralta y Rafael Ángel Troyo.